viernes, 3 de marzo de 2017

Bienvenido Marzo

Marzo siempre ha sido un hito importante en mi vida, desde mi nacimiento y a lo largo de los años marzo es un mes de cambios... en lo personal, familiar y laboral.


El boletín pasado fue "opacado" por un conflicto de intereses que nos hizo retroceder tan solo un paso en nuestra propuesta de valor para el sector industrial; sin embargo, estamos preparando nuevas propuestas y nuevo material –un tanto irreverente– para generar expectativas que ayuden a consolidar esta iniciativa denominada PROCONCORR PERU "Los mejores profesionales en control de corrosión del Perú".

Esta última semana, después del stress del trabajo, la tentación de la calle y lo toxico de la televisión peruana, me dí un tiempo para leer y escribir sobre un tema que en algún momento no supe como explicar… 


¿Qué diferencia existe entre Asesoría y Consultoría?


Después de un análisis semiótico de dichas palabras decidí agregar dos actividades adicionales, dándoles ubicación y contextos adecuados para así completar la idea de lo que a mi parecer forma una "cadena de valor para la toma de decisiones de mejora" entre empresas y/o entre individuos con intereses vinculantes.

CONSEJERÍA –> ASESORÍA –> CONSULTORÍA –> ENTRENAMIENTO

Vamos a tratar de explicar de manera práctica cada una de estas actividades dándoles una secuencia racional:

CONSEJERÍA

Es el apoyo inicial para la toma de decisiones… Dicen por ahí que: “un consejo, hasta de un conejo”... Yo no le creería a un conejo, pues quien te da un consejo generalmente es una persona muy cercana y de tu total confianza... Aún así, eres tu mismo quien decide finalmente tomar o no el consejo para ponerlo en práctica.

Aquí algunos consejos que podrían darte en el ámbito industrial:

  • Por qué no hacemos las cosas diferentes… ¿Te parece?
  • Cambiemos de proveedor de pintura….
  • Aprovechemos de hacer ese trabajo en la parada de planta…

Yo también te podría dar muchos consejos, pero… ¿Me creerías? Todo depende de tu nivel de conocimiento del trabajo que realizas, más el nivel de confianza que te pueda generar el consejero... y esto dividido entre tu inteligencia emocional; el resultado debería ser siempre una buena decisión pero íntegramente tuya.


ASESORÍA

La asesoría es mucho más específica; se puede recibir gratis pero condicionada o puedes contratarla para tomar una decisión basada en diversas ofertas basadas en sustento técnicos como, por ejemplo:

  • Decidir qué equipo me puede servir mejor para el trabajo que realizo.
  • Decidir sobre los costos de hacer un trabajo en taller o en obra.
  • Decidir qué protección anticorrosiva debo adquirir y por qué.
  • Conocer sobre experiencias en otros trabajos similares.

En resumen, la asesoría o los asesores brindan varías alternativas, técnicamente sustentadas que ayudan a tomar la mejor decisión, pero también por regla general, se tienen que descartar varias de estas alternativas.

Yo también podría asesorarte, aquí a la derecha tienes mis referencias y como contactarme… pero debes saber que mi asesoría puede tener algún costo a futuro si en realidad la consideras valiosa.

CONSULTORÍA

Esto ya es cosa seria... Generalmente uno contrata a una consultora para hallar las causas de un problema, solucionar un problema o prevenir la ocurrencia de algún problema.

Como ven la consultoría puede actuar en escenarios con sucesos pasados, presentes y futuros, pero siempre llegará a una conclusión o solución del problema. En estos casos, el cliente no puede cuestionar o descartar el método del consultor, ya que se supone que el estudio en cuestión supera la capacidad de manejo y hasta la comprensión que el cliente tiene sobre el problema, y por lo tanto solo queda esperar el resultado intrínseco de los hechos bajo la auditoría del consultor según su especialidad.

Algunos ejemplos de consultoría en el ámbito industrial:

  • La ingeniería que se contrata para desarrollar algún proyecto específico.
  • El análisis de fallas de soldadura o recubrimiento aplicado a una estructura.
  • El estado financiero de una empresa interesada en comprar o venderse.
  • A nivel personal, el diseño o revisión de especificaciones, estándares o procedimientos de trabajo para la ejecución de un proyecto específico.

Algo que diferencia a la consultoría de las demás acciones descritas es la imparcialidad, aquí no debería de haber sesgos comerciales con intereses definidos o pactados. La consultoría es más parecida a un peritaje técnico "legal" en donde los resultados priman sobre los intereses.



Si necesitas consultoría, yo puedo ayudarte en varios aspectos de la protección anticorrosiva de activos productivos… pero como no soy dueño de todo el conocimiento y experiencia del mundo, puedo recurrir a colegas y amigos con diversas especialidades, incluso empresas que podrían brindarte las soluciones que requieras. [Esta es la esencia de PROCONCORR]


ENTRENAMIENTO


Ya tomaste el consejo de tu “consejero” ya te asesoraste con tus proveedores o asesores personales; incluso te sometiste a la evaluación de una consultora especializada para asegurarte de que la decisión que tomaste es la mejor... y luego: ¡Implementaste la mejora!... ¡Desarrollaste el proyecto!... Ahora ¿Quién podrá ayudarte a capitalizar el proyecto hecho realidad?


La mayoría de “buenas ideas” requieren de un tiempo para implementarse y que todos los miembros del equipo puedan entenderlas y manejarlas. El entrenamiento –a mi pensar– inicia en la difusión del plan de acción de como operar el proyecto.

El entrenamiento propiamente dicho, tiene que ser estructurado y diversificado según las funciones y rangos; tiene que haber acompañamiento en la práctica y en la medición de resultados. Sin estos parámetros y acciones adicionales, nada nos aseguraría que al final, todos “hablen el mismo idioma operativo”. Si obviamos estos parámetros, el entrenamiento pasaría a ser una "mera" charla informativa y solo se pondría en riesgo todo lo invertido en desarrollar esa “buena idea” por parte del gestor de proyectos.

En la practica vemos que los asesores o las consultoras, muchas veces asumen el rol de entrenar, teniendo en cuenta que esto les sirve también para garantizar la correcta implementación de sus propuestas, sin embargo, es necesario que el cliente también asuma el control del entrenamiento asegurándose que cada persona a su vez, asuma el cambio como propio, desde la manera de pensar, hasta la manera de actuar… y esto se logra definitivamente con la motivación adecuada que solo el dueño del proyecto puede asegurar a sus unidades de producción.

En lo que a mí respecta, he entrenado a mucha gente a lo largo de mi vida laboral y lo seguiré haciendo… Aunque me gustaría que esto del “entrenamiento” sea más formal y que tenga peso académico como créditos por horas u otra forma de valorar esta actividad para el alumno y el entrenador... pero eso merece otro articulo en un próximo boletín.


Espero sus comentarios.
Atentamente.
MARTÍN HERRERA Consultor Anticorrosivo